Introducción al Blog de Posgrado de Keith L. Andrews

28 Jan 2018 | Pensamientos
Esta nueva - y con toda probabilidad última - etapa de mi vida la estoy llevando como un trabajo de investigación de postgrado. Quisiera ver si hay otros que se interesan por cuestiones similares y deseen participar en un diálogo.
Introducción al Blog de Posgrado de Keith L. Andrews

De modo que he decidido compartir ideas con cualquier persona dispuesta a dedicar algo de su tiempo para leer los ensayos cortos (generalmente de 500-800 palabras) que publicaré cada 15 días. Esta es una invitación abierta a todos ustedes: Hablemos, tratemos de estar juntos en nuestra soledad, en lugar de estar solos en la soledad.

¿Por qué designo a esta etapa de mi vida como “un postgrado”?  Sencillo. He estado estudiando, aprendiendo y preparándome durante décadas dentro o cerca de instituciones educativas, de investigación y de capacitación. Ahora he dejado las oficinas, aulas y laboratorios regimentados; y me están pagando para realizar actividades de investigación y desarrollo autodirigidas. (Gracias a la Administración del Seguro Social de los Estados Unidos, el Estado de la Florida y TIAA por hacer de este un puesto vitalicio.) La expectativa es que debo hacer algo original. Al menos eso es lo que espero; me resisto a volverme madera muerta.

Esto promete ser el mejor empleo que he tenido en mi vida: investigaré lo que desee, me relacionaré con aquellos que comparten mis intereses, no habrá informes trimestrales o anuales requeridos por los donantes, y yo elegiré a la audiencia que realice mi evaluación.

No me queda mucho tiempo, por lo que tengo la intención de sincerarme, pues sé que voy a hacer un progreso más rápido si comparto mis ideas y preocupaciones abiertamente, para luego, a través de conversaciones de seguimiento con otros, podemos de manera colectiva desarrollar una mejor comprensión de los temas.

Toda mi vida he vivido dentro de contextos de instituciones convencionales con reglas claras, metas concretas, mediciones precisas y con personas muy tradicionales (generalmente personas muy buenas).  Pero en esta nueva fase - mi trabajo de posgrado - me siento obligado a volver a centrar la atención, con rebeldía, en algunas grandes cuestiones existenciales, utilizar herramientas que a menudo no son exclusivamente lógicas y buscar la retroalimentación de diversas  personas. Vamos a ver si tengo éxito antes de que las sinapsis senezcan.

  

Anticipo que los escritos que compartiré encajen en cuatro categorías:

1) Reflexiones sobre la escultura y el arte y su lugar en la sociedad contemporánea. Todos ustedes artistas con formación académica por ahí: por favor, por favor, por favor, lean y refuten lo que escribo. Déjenme confesar: Soy un cartesiano, un creyente en la Ilustración, mis músculos están atrofiados debido a 40 años de estar atado por las normas burocráticas, sufro de una deficiencia de vitamina P (P por la Poesía), y no tengo formación artística académica. Así que, amigos artistas, sean buenos samaritanos y acójanme, pongan vendas en mis heridas y cúrenme. (OK, eso fue algo exagerado, pero ya me será difícil avergonzarme más de mí mismo.)

2) Comentarios sobre mis nuevas piezas de arte cuando las complete.

3) Reflexiones sobre ideas no relacionadas con el arte. Voy a presentar algunas hipótesis tentativas sobre la vida, así como confusiones, frustraciones y satisfacciones.

Una promesa: Evitaré la tentación de los viejos que piensan que tenemos inestimables palabras de sabiduría que debemos pasar a los mas jóvenes antes de  despedirmos. Estaré interrogando, no predicando.

Sospecho que estas reflexiones sobre la vida, a veces podrán parecer inaceptablemente adolescentes. Pero eso es porque, como la mayoría de nosotros, dejé de prestar atención a las preguntas realmente grandes acerca de la vida cuando desemboqué en la edad adulta; mi desarrollo profesional y mi creciente familia desviaron mi atención de esas grandes interrogantes; y luego, cuando las cosas volvieron a calma, la inercia habitual del no pensar me mantenía en la desatención.

Anticipo que muchos lectores sofisticados se reirán de mis ideas y harán clic. OK, bye – bye; aceptaré esa realidad y me quedo siendo yo mismo.

"Los últimos años de la vida son como el final de una fiesta de disfraces, cuando las máscaras se caen." - Arthur Schopenhauer

4) Muestras de mi escritura creativa - incluyendo poesía. Porque para mi propio bien necesito alejarme del formato de ensayo.

   

(Respiración profunda) ... Aquí va ....